| VOLVER |

Y presentaba en la misma dos memorias que en ese momento no fueron tenidas en cuenta y que albergaban el g�rmen de su futura obra monumental. En 1878 viaja a Europa y all� exhibe su colecci�n prehist�rica y paleontol�gica en la Exposici�n Universal de Par�s, donde fue el asombro y la admiraci�n de los cient�ficos m�s importantes de la �poca y obtuvo el reconocimiento que en su pa�s le negaron. A los 23 a�os publicaba su primer libro: "Antig�edades indias en la Banda Oriental" . Y a los 25 tuvo una gran actuaci�n en el Congreso de americanistas en Bruselas, luego public� dos libros: "La formaci�n Pampeana" y "La Antig�edad del hombre del Plata"
y su director vitalicio Francisco P. Moreno pidi� al gobierno que designara a Florentino Ameghino como subdirector y secretario, y �ste aport� su colecci�n para enriquecer el departamento paleontol�gico del nuevo museo, y tambi�n su hermano Carlos toma el puesto de naturalista viajero y comienza sus viajes a la Patagonia donde realiza importantes descubrimientos. Pero esto no dur� m�s de un a�o, ciertas diferencias y celos profesionales hicieron que Moreno exonerara a su subordinado de su puesto oficial. Ameghino que hab�a abandonado su c�tedra en C�rdoba por aceptar el cargo en el Museo, queda nuevamente sin trabajo y sin dinero para sus investigaciones, otra vez tiene que recurrir a fundar una librer�a(**) donde por tercera vez volvi� a iniciar una colecci�n de f�siles, ya que Moreno le hab�a prohibido la entrada al museo y no pod�a estudiar sus propios f�siles. Es aqu� donde se destaca la labor de su hermano Carlos, el cu�l viaja a los m�s rec�nditos lugares del pa�s en las condiciones m�s deplorables a la b�squeda de nuevos ejemplares y datos estratigr�ficos para que su hermano organice y clasifique. Fue en esta �poca que public�, gracias al apoyo de la Academia de Ciencias de C�rdoba, su obra m�s importante "Contribuci�n al conocimiento de los Mam�feros f�siles de la Rep�blica Argentina" que ven�a acompa�ada de un atlas con l�minas con dibujos de su propia mano. Esta obra la escribi� en s�lo 14 meses y le vali� una medalla de oro en la exposici�n universal de Par�s del a�o 1889. Durante ese per�odo de alejamiento y de estrechez econ�mica, public� m�s de la tercera parte del total de sus trabajos.
DIRECTOR DEL MUSEO NACIONAL:
El homenaje m�s importante que le podemos hacer es seguir sus pasos y su ejemplo: (Citando a J. Frenguelli) "�con su obra y su vida �ntegramente consagrada a ideales puros, parece repetir: Que vuestra gu�a sea la curiosidad inextinguible de saber. Ella os indicar� la ruta, pero no siempre bastar� a salvaros de los escollos de que est� sembrado el �spero camino. Si incurrierais en el error, no tem�is a los reproches y el escarnio de los t�midos�Recordaos que la historia es ben�vola para qui�n, despu�s de las derrotas, consigue una victoria; pero siempre condena al olvido al cr�tico infecundo� "
| VOLVER |
| Ir a mi Home Page | Ir a "Cuando Reinaban los Gigantes |